Enfermedad Celíaca: el gluten es su detonante

La Enfermedad Celíaca (EC) es una condición muy particular en la que por una predisposición genética, el gluten desencadena una respuesta inmunitaria bastante fuerte. Esta respuesta ocasiona daños crónicos en el intestino, la piedra angular de la salud humana.

El pan que se consume hoy no es el pan de hace décadas. Los cultivos han cambiado, el gluten también y nuestra exposición a esta proteína también se ha incrementado significativamente. Y aunque el gluten ahora es un tema mucho más popular, la Enfermedad Celíaca sigue siendo muy desconocida.

La prevalencia de la Enfermedad Celíaca y sensibilidad al gluten, ha aumentado de una forma alarmante en los últimos 50 años.

El diagnóstico de la celiaquía se ve en el sólo el 1-2% de la población, pero el 40% tiene la predisposición genética a desarrollarla.

De hecho, en un estudio publicado por la Sociedad Americana Gastroenterológica mostró que en los últimos 50 años, la Enfermedad Celíaca ha aumentado de 1 en 650 personas a 1 en 120

Comencemos desglosando todo lo que está implicado en la Enfermedad Celíaca, desde sus detonantes hasta los posibles tratamientos.

 

¿Qué es el gluten?

Masa de pan hecho con harina de trigo
El gluten permite que las masas sean consistentes y amasables.

El gluten es la proteína que resulta de la unión de dos proteínas más pequeñas llamadas gliadina y glutenina. La gliadina es la fracción más problemática.

Ésta proteína, está presente en una variedad de cereales como el trigo, centeno, cebada, avena, espelta, entre otros. Pero el trigo tiene la más alta concentración. 

 

En la cocina, el gluten es el responsable de darle características elásticas a las masas. Haciendo posible manejarlas con gran facilidad en la panificación. 

El gluten también hace posible el proceso de fermentación porque permite la retención de gases. Así se consigue el aumento de volumen y la esponjosidad en las masas.

 

¿Cómo ocurre la reacción al gluten en la celiaquía?

La presencia del gen de la Celiaquía: HLA DQ2 y/o HLA DQ8 es lo que predispone genéticamente a una persona a desarrollar la Enfermedad Celíaca. Sin embargo, el desarrollo de la EC se detona con el consumo de gluten e incluso otros factores que puedan comprometer la salud intestinal. 

Antes de avanzar en la reacción que genera el gluten en una persona celíaca, te voy a explicar varios conceptos que necesitarás para entenderla completamente cómo sucede:

  1. Las proteínas están compuestas por una gran unión de aminoácidos.
  2. Los péptidos también se componen de una unión de aminoácidos pero la cantidad es menor. 
  3. Las proteasas son moléculas de la familia de las enzimas que con ayuda de H20, rompen los enlaces de péptidos de las proteínas para hacer posible su digestión. 
  4. Un antígeno es una molécula que el organismo reconoce como agresora y como consecuencia, el sistema inmunitario genera una respuesta de defensa con la formación de anticuerpos que la combaten.

¿Qué hace la variación genética de la EC?

Lo que hacen las dos variantes de genes HLA DQ2 y/o HLA DQ8, es producir receptores que se unen mucho más firmemente a los péptidos de la gliadina (fracción del gluten) que otras formas de receptores presentadores de antígenos. Esto hace que haya una mayor probabilidad de activación de las células inmunes.

Por otro lado, en las personas celíacas las proteasas del intestino encargadas de romper y descomponer proteínas, son ineficientes a la hora de descomponer los péptidos del gluten. 

En otras palabras, estos dos factores hacen que el cuerpo fácilmente identifique el gluten como un antígeno del cual se debe defender haciendo que desde la mucosa intestinal, se generen reacciones inmunológicas que generan inflamación.

Otro mecanismo que se ve en la reacción de la Enfermedad Celíaca, es el estímulo que genera el gluten en la producción de zonulina. Esta última, es una proteína que modula el flujo de partículas que va del intestino al flujo sanguíneo. Esto es, la permeabilidad de las uniones estrechas de la pared intestinal. 

Uniones estrechas de la barrera intestinal
El gluten puede romper estas uniones y generar permeabilidad intestinal.

Si hay un aumento de la zonulina, habrá una permeabilidad intestinal aumentada. De esta forma, no sólo pasarán a nuestro flujo sanguíneo los nutrientes y moléculas beneficiosas que necesitamos. Sino que también tendrán entrada partículas que pueden llegar a ser tóxicas y reconocidas como agresoras. Incluido el gluten.

Una predisposición genética + una digestión ineficiente del gluten + una permeabilidad intestinal aumentada = la receta para un daño intestinal crónico.

 

¿Cuáles son los síntomas de la EC?

Sus síntomas, además de ser bastante diversos aunque los síntomas digestivos son los más frecuentes. Por ejemplo: el dolor abdominal, la diarrea y la dispepsia. Sin embargo, estos síntomas pueden fácilmente pasar desapercibidos y no relacionarse de forma inmediata con el consumo de esta proteína. 

Es importante traer a la mesa la evidencia clínica que ha recogido el Dr. David Perlmutter, un neurólogo quien a lo largo de su trabajo con pacientes que padecían un trastorno cognitivo o neurológico, encontró siempre una constante: fuertes sensibilidad al gluten y enfermedad celíaca. 

El reconocido Dr. Alessio Fasano (más adelante hablaremos más de él), también se encontró con evidencia similar a lo largo de su experiencia con pacientes.

Personas que sufrieron de migrañas crónicas toda su vida, ataques de epilepsia, depresión, ansiedad, insomnio, sobrepeso, falta de concentración, síndrome de Tourette, TDAH, enfermedades inflamatorias como la artritis, entre otras, tuvieron una enorme mejoría al eliminar por completo el gluten de su dieta. Y en algunos casos, incluso le dijeron adiós a esas condiciones.

Este tipo de evidencia, muestra que no son únicamente los síntomas gastrointestinales los que develan una reacción al gluten.

En realidad, la presencia de cualquiera de los síntomas/condiciones mencionadas, pueden sin lugar a dudas, ser un reflejo de una reacción al gluten.

Cabe resaltar que, una vez se sospecha y se ahonda en el proceso de diagnóstico, se podrá determinar si se trata de la Enfermedad Celíaca o una Sensibilidad al Gluten no celíaca.

 

Enfermedades asociadas a la celiaquía

Existen enfermedades asociadas a Celiaquía que pueden llegar a desarrollarse (especialmente de carácter autoinmune) incluso sin aún tener un diagnóstico de EC:

alopecia
Así se ve la Alopecia Areata. Fuente: MedlinePlus Magazine
  • Dermatitis Herpetiforme (DH): se forman ampollas y urticaria en zonas como el cuello, la parte inferior de la espalda, codos, rodillas e incluso en la cara. Pueden causar mucha picazón, quemazón y debilitar la piel.
  • Alopecia areata: enfermedad autoinmune en donde las mismas células inmunitarias atacan el folículo piloso haciendo que se pierda el cabello.
  • Psoriasis: enfermedad autoinmune en la piel inflamatoria y crónica que genera placas de inflamación, enrojecimiento en la piel, engrosamiento y escamas.
  • Ataxia por Gluten (AG): el cerebro se ve directamente afectado provocando descoordinación en ciertos movimientos especialmente de las manos y las piernas.
  • Anemia Ferropénica: niveles muy bajaos de hierro en la sangre.
  • Leucopenia: niveles extremadamente bajos de leucocitos (glóbulos blancos)
  • Artritis: inflamación en las articulaciones que causa dolor, hinchazón y rigidez.
  • Síndrome de Sjogren: trastorno de carácter autoinmune en donde el sistema inmune ataca las glándulas que producen saliva y lágrimas provocando una gran sequedad en la boca y los ojos.
  • Osteoporosis: disminución en la densidad de la masa ósea.
  • Hipotiroidismo: condición en la cual la glándula de la tiroides no produce suficientes hormonas tiroideas afectando todo el metabolismo haciéndolo lento. Esto puede generar desde obesidad hasta enfermedades cardíacas.
  • Epilepsia: irrupción en el equilibrio de la actividad de las células nerviosas del cerebro que acaba generando convulsiones.
  • Hepatitis autoinmune: condición de carácter autoinmune en donde las células inmunes atacan el hígado generando inflamación crónica y daños que afectan su funcionamiento.

 

Diagnóstico de la celiaquía

Si después de conocer la sintomatología de esta condición crees que el gluten puede estar generando reacciones en tu cuerpo hay algo que puedes intentar.

Elimina completamente el gluten de tu alimentación por 21 días y prestar mucha atención a los cambios que experimentes en tu cuerpo en ese tiempo. 

Puedes hacer un diario y registrar de forma escrita lo que experimentes. Cómo se siente tu digestión, síntomas intestinales, niveles de energía, dolores de cabeza, estado de ánimo, tu piel, la capacidad para concentrarse, cómo estás durmiendo, etc. 

Pasados estos 21 días, reintroduce el gluten. Otra vez, pon atención a tu cuerpo y registra cómo se siente cada uno de los aspectos que describimos arriba.

¿Notaste cambios? ¿Mejoras al dejar de consumir gluten y desmejoras al reintroducirlo? Eso te dará señales de si el gluten puede estar haciéndote daño.

 

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La celiaquía también afecta a los niños…

niño autista
Los trastornos cognitivos y de comportamiento suelen acompañarse de sensibilidades al gluten.

Para tu sorpresa, a menudo se encuentra que los niños con autismo, ADHD y otros trastornos cognitivos o neurológicos, tienen problemas intestinales ligados al consumo del gluten

La introducción de gluten en la dieta de los niños durante los primeros 5 años de vida, está asociado con un incremento en el riesgo de desarrollo de autoinmunidad y de la Enfermedad Celíaca en los niños predispuestos genéticamente. Esto es algo que se encontró en un estudio realizado en 6605 niños.

Por otro lado, hay un factor asociado al desarrollo de la Enfermedad Celíaca que no se puede dejar a un lado: la salud del intestino.

Hay diversos factores que alteran el estado de la microbiota intestinal. Además del consumo de gluten, el uso de antibióticos, el nacimiento por cesárea, el uso de antiácidos, el consumo de caseína (proteína de la leche), entre otros., contribuyen a la pérdida de la función intestinal

El estado del intestino es un factor predisponente a muchas condiciones ya que afecta directamente nuestro sistema inmunológico.


No solo se trata de la predisposición genética, sino de qué otros factores externos juegan un papel en el deterioro de la función intestinal al generar permeabilidad intestinal.

 

Tratamiento de la celiaquía

Alimentación libre de gluten

alimentación libre de gluten
Una alimentación basada en comida real y deliciosa.

El tratamiento que hasta el día de hoy es completamente seguro y efectivo es eliminar el detonante de la cascada de reacciones que describimos en este artículo: el gluten. 

Aunque pueda parecer difícil, una alimentación libre de gluten es posible llevarla de forma efectiva. Más aún, con todas las alternativas saludables y libres de gluten que hoy en día hay en el mercado.

Hoy hay consumidores mucho más conscientes. 

Una alimentación basada en comida real por definición elimina el gluten y muchos de los productos que pueden tenerlo de forma oculta. 

En este artículo ‘Dieta Libre de Gluten: la guía definitiva’, conocerás qué alimentos tienen o no gluten, cómo se ve una dieta sin gluten (ideas de comidas y recetas), cómo puedes sustituirlo en la cocina y algunos tips que te servirán toneladas y te prometo que te harán todo muchísimo más fácil.

Aún si no eres celíac@, te beneficiarás de una alimentación sin gluten.

 

Complementar con el uso de probióticos

El intestino es un ecosistema fascinantemente complejo en donde sus habitantes (las bacterias) actúan en sinergia para mantener este ambiente sano, fuerte y resiliente.

El daño que se genera a raíz de la reacción que genera el consumo de gluten en una persona celíaca, ocasiona un desequilibrio total en el ambiente intestinal haciendo que este ecosistema quede frágil y reactivo.

Se especula que en el intestino de las personas celíacas que no han sido tratadas, se encuentra mayor cantidad de cierto tipo de bacterias (Gram-negative) que en las personas celíacas que ya han sido tratadas. Este tipo de bacterias al parecer contribuyen a la pérdida de tolerancia al gluten.

enfermedad celíaca
Bacterias Gram-negativas

También, se ha encontrado que en los niños con Enfermedad Celíaca sin tratar, su microbiota muestra mayores cantidades de Bacteroides (un tipo de bacterias Gram-negativas) que han mostrado efectos pro-inflamatorios.

Ahora, así como hay bacterias malas, también hay bacterias buenas que tienen efectos protectores y antiinflamatorios. Estos son los probióticos (Lactobacillus y Bifidobacterium). Sin embargo, la cantidad y/o diversidad de estas bacterias varía cuando se compara la de niños con Enfermedad Celíaca vs. niños sanos y adultos con Enfermedad Celíaca vs. adultos sanos. 

Los estudios clínicos realizados hasta ahora no arrojan resultados contundentes. Pero esta variación en la microbiota intestinal sugiere que el tipo, la cantidad y diversidad de bacterias intestinales, pueden estar jugando un papel protector o agravante en la Enfermedad Celíaca.

Esto encontraron investigadores en Finlandia

En Finlandia, se hizo una investigación en la que en la que se agregaron cultivos de bacterias probióticas (Lactobacillus fermentum y Bifidobacterium lactis) a cultivos de células epiteliales del intestino con la intención de determinar el efecto que los probióticos tienen sobre el daño celular causado por el gluten (específicamente la gliadina). 

Los resultados fueron sorprendentes al mostrar que las Bifidobacterium Lactis lograron inhibir la permeabilidad causada por la gliadina y ambas bacterias tuvieron efectos protectores frente a las alteraciones en las uniones estrechas intestinales.

El hallazgo más consistente ha sido que los niños con Enfermedad Celíaca presentan niveles muy bajos de Lactobacillus y Bifidobacterium. Es decir, tienen muy pocas bacterias buenas.

Por esto, en el tratamiento de la Enfermedad Celíaca, la implementación de los probióticos pueden ser un aliado en la recuperación del daño intestinal.

Otros hallazgos prometedores de posibles tratamientos

Gluten modificado

enfermedad celíaca
Cultivo de trigo

Se ha estado desarrollando un gluten modificado genéticamente con una menor capacidad de activar el sistema inmunitario. Y en consecuencia, disminuir la toxicidad que se ocasiona en la EC. 

Lo que hace esto posible es el tratamiento de ciertos residuos de los péptidos del gluten a los que el sistema inmune reacciona con moléculas que pueden bloquearlos (Lysine methyl ester o Lys-CH3) y así disminuir su inmunotoxicidad. Así, al tratar harina de trigo con dichas moléculas, se podría neutralizar la actividad de las células inmunes (células T) causada por la inmunotoxicidad de los residuos del gluten.

También se ha encontrado una variación genética en los productos del trigo en la que también varía la cantidad de péptidos del gluten que estimulan la reacción de las células del sistema inmune (linfocitos T). 

En ese orden de ideas, en un futuro podría ser posible cultivar trigo que tenga una baja cantidad de esas partes del gluten que ocasionan las reacciones del sistema inmune.

Inhibidores de zonulina

¿Recuerdas que unos párrafos atrás hablamos de la proteína que modula la permeabilidad de las uniones estrechas del intestino? Si, la zonulina.

Alessio Fassano es un médico gastroenterólogo e investigador italiano. Él, junto con su equipo, descubrió esta proteína en el año 2000 y lo que esta hacía en el intestino.

Su trabajo e investigación alrededor del intestino, el gluten y la Enfermedad Celíaca lo han hecho un pionero en el campo.

El Dr. Fasano fue unos de los cofundadores de Alba Therapeutics y participó en la investigación de un medicamento que al tomarlo antes de consumir alimentos con gluten, puede inhibir la zonulina y por tanto evitar la permeabilidad intestinal aumentada que se genera con la ingesta de gluten en la EC. Se trata del Acetato de Larazotide

Este medicamento ha sido sometido a varios estudios clínicos randomizados en donde se han visto resultados bastante prometedores. 

En el primer estudio se vio que este medicamento reducía la disfunción intestinal generada por el gluten, la producción de moléculas inflamatorias y los síntomas gastrointestinales. 

En uno de los estudios más recientes, se encontró que el 75% de los pacientes con Enfermedad Celíaca que fueron tratados con un placebo y fueron expuestos al gluten desarrollaron los síntomas clásicos. Mientras que de los pacientes que fueron expuestos al gluten y tratados con Acetato de Larazotide, sólo el 14% desarrollaron síntomas.

Aunque los resultados han sido bastante positivos y prometedores, las investigaciones y estudios clínicos continúan en proceso. Tal vez, en unos años, este medicamento pueda estar disponible en el mercado.

Tratamiento con enzimas

Hay péptidos del gluten que resisten el proceso de degradación de las enzimas (proteasas) en el tracto intestinal. Cuando esto ocurre, estos péptidos sin digerir estimulan las células inmunitarias (Linfocitos T) y se inicia una respuesta inflamatoria.

Investigadores encontraron que hay una enzima llamada prolil-endopeptidasa (PEP) derivada de una bacteria (Flavobacterium meningosepticum) que mostró poder descomponer los péptidos del gluten que las enzimas del tracto digestivo no eran capaces de romper. 

Tanto en experimentos in vitro como in vivo (es decir en laboratorios y en humanos), estos péptidos del gluten se degradaron y perdieron su capacidad de hacer reaccionar a las células inmunes cuando fueron expuestos a la enzima PEP.

Estos resultados sugieren que una suplementación oral con este tipo de enzimas, podría prevenir la respuesta inflamatoria de las personas celíacas al poder descomponer el gluten en fragmentos no tóxicos.

Si no soy celíaco ¿Debería evitar el gluten?

La sensibilidad al gluten no celíaca es más frecuente de lo que te imaginas. Debido a su composición el gluten puede generar permeabilidad intestinal y por tanto inflamación alteraciones en la mucosa intestinal e inflamación. Esto sin necesidad de tener una alergia o una predisposición genética. 

Como resultado, se pueden ver efectos tan amplios derivados de este desequilibrio. Dentro de estos están las condiciones dermatológicas, hormonales, emocionales, mentales y deficiencias nutricionales por una mala absorción de nutrientes como el hierro, calcio, ácido fólico y vitaminas.

De hecho, las personas con Síndrome de Intestino Irritable suelen ser hipersensibles al gluten.

La salud intestinal es clave…

Es de suprema importancia que sepas que sanar un desbalance intestinal, requiere mucho más que sólo dejar de consumir gluten. Ya que al mismo tiempo, hay otros alimentos que pueden estar contribuyendo a esa cascada de inflamación. 

Pueden haber otras condiciones de fondo que estén afectando la microbiota intestinal y por supuesto, el gluten puede estar siendo un promotor. 

Si recuerdas, al principio del artículo mencionamos el gran porcentaje de personas que tienen una predisposición a desarrollar la EC, pero dado el bajo porcentaje de personas que son diagnosticadas nos habla de que ciertamente, hay factores ambientales que contribuyen a su desarrollo y que hay un gran porcentaje de personas sin diagnosticar

Si eres una persona que experimenta cualquier tipo de síntomas intestinales, migrañas, problemas dermatológicos, depresión, ansiedad, deficiencias nutricionales, fatiga o dificultad para concentrarse, vale la pena que revises la salud de tu intestino. Sin duda puedes verte beneficiad@ de una alimentación libre de gluten.

Te invito a que revises esto con un médico funcional de confianza ya que el gluten u otros factores pueden estar afectando la salud de tu intestino

 

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